San Sebastían de Palmitas

Es mucho nombre para un corregimiento tan pequeño. Sin embargo tiene una envidiable

ubicación a media hora de la ciudad de Medellín por una excelente vía. Visto desde la conexión

vial: Valle de Aburrá es como un lindo pesebre, con sus pequeñas casas colgadas de la montaña y

pintadas de diferentes colores le dan al pasajero una muy bonita impresión.

La zona rural en grande rica en aguas y en producción agropecuaria. Su clima frío hace que la

gente se recoja temprano y sea algo reservada y que tengan un bonito color en sus mejillas. En las

noches hay sitios para divertirse y pasar un rato agradable.

A su alrededor casafincas, estaderos donde se pueden saborear deliciosos platos de comidas

típicas como chorizos, arepas, chocolate, quesito. Así como comidas más sofisticadas. En estos

sitios trabajan la mayoría de las gentes del corregimiento, porque allí no hay otra fuente de

empleo.

Tiene un atractivo turístico a la vez que es una salida para las gentes y los productos de la región.

Es el METROCABLE, que pasa por encima de la quebrada La Aguamala. Desde arriba se oye el rumor de la quebrada que canta la misma canción pero con diferente agua. Al otro lado, casas

campesinas donde nos atendieron como si fuéramos de la familia.